REALIZAR BREVE INTRODUCCIÓN
SOBRE PABLO NERUDA Y LOS VEINTE POEMAS.
POEMA 1 “CUERPO DE MUJER”
El tema de este poema es el amor
nostálgico y apasionado.
La estructura: cuatro estrofas de
cuatro versos alejandrinos cada una, con rima asonante en los versos pares.
Desde el comienzo en la primera
estrofa el sujeto lírico recurre a un
apóstrofe que consiste en la invocación
dirigida a alguien “cuerpo de mujer”.
Anuncia una de los temas relevantes que se presentarán en el pensamiento
de quien habla de una forma intensa y amarga.
Es necesario observar de qué manera
la invocación inicial se desarrolla, el pensamiento no se detiene y alude al objeto deseado para inmediatamente recordar de él
algunos atributos relevantes.
Otra figura empleada es ahora una
figura del lenguaje, el quiasmo. Este involucra un cruce de los elementos morfológicos y una consecuente alteración del probable paralelismo. El cruce se produce
entre los adjetivos de mujer/blancas/blancos y los sustantivos
cuerpo/colinas/muslos.
Una comparación completa el cuadro
enumerativo de los primeros dos versos: “te pareces al mundo”. Entrega del
cuerpo de la mujer , común al mundo.
Pero en ambos hay una donación
que mucho tiene de renuncia; en la mujer el sexo y el abandono, en el
mundo , ofrecimiento sin condiciones para que el hombre intente la dura tarea
de poseerlo. Inmediatamente aparece otro cuerpo: “mi cuerpo de labriego
salvaje”.
Esta segunda presencia física nos
conduce a la unión de dos seres y nos
coloca en el plano de la feroz acción
erótica. “Socavar” en términos morfológicos es una manera de invadir sin
restricciones, entrar en el otro para
alcanzar un objetivo “el hijo del fondo de la tierra”. Ese hijo,
metafóricamente es símbolo de logro
alcanzado, pero no sale de las entrañas femeninas sino de la tierra. Es un
eufemismo delicado para aludir a las entrañas de la mujer, de su cuerpo.
Ese hijo es la realización última en donde se cumple en términos de
aspiraciones largamente vividas, y se llega
al logro final.
La segunda estrofa señala “fui solo
como un túnel. De mí huían los pájaros”.
La soledad es la dueña de ese
espacio que el sujeto lírico recuerda con temor. El túnel es –mediante la comparación- quien
oculta la desesperada soledad de ese individuo entregado a la búsqueda. La
noción implícita de oscuridad y aislamiento completa la imagen .
Sigue la personificación de la noche.
Los pájaros huyen representando así el símbolo
del vacío y el presagio que no
debió haberse cumplido. La noche únicamente trae su mensaje de misterio y
lejanía.
“Para sobrevivirme” El verbo
sobrevivir empleado de manera reflexivo (me) involucra una metáfora, volver a ser yo mismo, emerger
de las propias cenizas. Pero para que
esto pueda cumplirse requiere “forjar” al sujeto amoroso como un arma. “Forjar” se trata de actuar sobre “el cuerpo de
mujer”, porque solo a través de él se cumplirá el destino trascendente del enamorado. La sucesión de
comparaciones son elementos primordiales que poseen un carácter agresivo.
La tercera estrofa. Es dado observar
el carácter antitético. Junto al término “venganza” escribiríamos “odio”, pero
el poeta dice “te amo”. Estableciendo así un factor que no por diferente va a dejar de ser doloroso. Seguir amando a pesar de la separación es una decisión individual. Persistir en el amor, inclusive
en este presente de separación en donde lo que correspondería es odiar, implica
entregarse a él, porque el sentimiento no abandona al alma del enamorado y el
sujeto lírico rememora mediante trazos
fugaces lo que fue su amada.
Y reaparece el sustantivo “cuerpo”
que ahora se viste con otras imágenes: de piel, de musgo, de leche ávida y
firme.
Estamos frente a tres sinécdoques, en
donde un elemento se ofrece en sustitución de otro . Se expresa la parte por el
todo. Sirve para caracterizar al ser amado en términos de partes individuales
del cuerpo, en vez de ser un complemento
coherente.
La piel, representación de la experiencia
amorosa y el tacto, se cree que ese cuerpo se resume a la piel tersa que toca.
“cuerpo de musgo”, elemento original, como la tierra, el barro del que estamos
hechos. “de leche ávida y firme”, hace referencia a una parte del cuerpo, a los
pechos de la amada. El adjetivo ávida nos incorpora a la idea de quién quiere
beber de ella. “firmes” corresponde a la firmeza de la amada.
Las siguientes cuatro sucesivas
invocaciones no son otra cosa que apóstrofes que enmarcan el cuadro de dolor
que padece el poeta. No podemos pasar por alto que el poeta utiliza una anáfora
de la expresión exclamativa “ah” la cual se reitera tres veces y encabeza cada uno de los
vocativos. Está insistiendo dramáticamente en el sufrimiento que este recuerdo
implica.
La metáfora “los vasos del pecho”
hace referencia a la posibilidad de beber de ella en el amor. La segunda “ojos de ausencia” resultan expresivos de un
sentimiento que deriva en sufrimiento inexcusable. Sus ojos reflejan una nostalgia devastadora.
La tercera metáfora “las rosas del
pubis” es la valoración de los momentos sexuales vividos y olvidados.
“Tu voz lenta y triste” El leitmotiv
(motivo dominante) de la tristeza impone su presencia unido a la lentitud de
una expresión cansada. La voz anuncia la desgracia que los ojos habían
presagiado.
La última estrofa. El segundo verso
cuenta con una asíndeton en donde se prescinde de las conjunciones cuando sintácticamente podrían ser muy útiles. Se emplean comas en
el segundo verso y en los últimos dos se reitera la conjunción (polisíndeton)
para dar fuerza a la expresión de los conceptos.
Por su parte, la anadiplosis
(repetición al final del verso y el principio del siguiente un mismo vocablo).
En este caso el término reiterado es “sigue” que si bien no aparece al
principio del último verso, esto sucede porque el poeta emplea también un
hipérbaton, alterando el orden lógico sintáctico con fines poéticos.
La elipsis, implica la supresión de algún elemento, sin que quede afectada la
claridad del sentido. En este caso, se
prescinde del verbo “seguir” en el segundo hemistiquio del último verso “y el
dolor infinito “sigue”.
En términos conceptuales, ese cuerpo
de mujer que implica con la identidad del mundo pertenece a la voz que habla.
“mía”. Y el amante reitera “persistiré”… seguiré amándote a pesar de todo y
continuaré creyendo en la eternidad del momento.
El sentido de los amores contrariados
se encuentra manifiesto en este primer canto de amor. El poema cierra de tal
manera que queda abierto. El poema sigue, al igual que la vida. Los conflictos
de amores jamás acabarán mientras no concluya la existencia.